La realización de una auditoría ambiental por parte de la Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM), además de evaluaciones médicas a los residentes de los poblados circundantes a la planta termoeléctrica, del corregimiento de El Arado en La Chorrera, fueron solicitadas por los representantes de corregimiento del distrito.

La decisión de los ediles va más allá, al solicitar a la Dirección de Ingeniería Municipal que se abstenga de emitir ningún permiso de construcción para la instalación de 24 nuevos generadores de energía en esta planta termoeléctrica.

La instalación de los nuevos motores obedece a un proyecto por parte de la empresa Panam Generating. Ltd, para ampliar la capacidad instalada de la planta hasta los 136.8 mW.

La principal preocupación de las autoridades locales es la emanación de gases y otro tipo de afectaciones a la población. También se adelantan las investigaciones por parte del Departamento de Asesoría Legal del Municipio, con relación al Estudio de Impacto Ambiental (EIM) aprobado a dicha empresa para la instalación de los generadores para detectar "posibles irregularidades y contrariedades contenidas en este estudio".

A través de su página web, la empresa Panam Generating Ltd asegura ejecutar "periódicamente el Programa de Monitoreo de Calidad en un sitio previamente establecido con la autoridad ambiental local. Aunque en dicha página no se hace ninguna alusión a la ampliación de la capacidad instalada de la planta.