Yo tiendo a ser despistada y olvidadiza. Trato de ser muy organizada para cumplir con mis tareas profesionales, hogareñas y personales.

Pese a eso, nunca he podido explicarme cómo es que olvido hasta la fecha de mi aniversario de bodas, pero recuerdo cada detalle del nacimiento de mis hijos.

Esta semana conversaba con una amiga sobre cómo veo a mi hijo mayor. Ya es un adulto que con su propio esfuerzo se compró su casa y está a punto de estrenarla.

Me parece mentira que un día me desplomé cuando lo vi, recién nacido, en una incubadora con los ojos vendados y una luz sobre su pequeño cuerpo. Nació con ictericia y yo creí que había nacido ciego. El corazón se me fue a los pies.

También recuerdo vívidamente el nacimiento de mi hija. Me parece verla cuando la colocaron sobre mi pecho. Inmediatamente la sentí fuerte, con carácter, con temple. Y así es hoy día.

La recuerdo pequeña, con las cejas tan marcadas que parecían pintadas, morenita y mirándome como si me retara.

Y luego llegó mi hijo más pequeño. También me lo colocaron en el pecho y lo sentí vulnerable. Era muy largo, pero delgadísimo; no pesaba ni seis libras.

Tenía los ojos claros y el médico me dijo que parecía un "chino gringo".

¿Cómo es que tengo esas imágenes tan vivas en mi memoria y no puedo recordar lo que pasó ayer? Como diría mi amiga: "O tienes alzhaimer, o la explicación es simple, eres madre". ¿Será esto último? ¿Usted qué opina?