Un total de 423 aficionados del RCD Espanyol, vieron frustrado su sueño de vivir en directo la final de la Copa de la UEFA, porque los vuelos que habían contratado no estaban programados.

Ataviados con camisetas, bufandas, gorros e incluso faldas escocesas con los colores blanquiazules, más de medio millar de indignados aficionados, se sorprendieron porque los vuelos chárter que debían llevarles hasta Escocia, no constaban entre los que salían ayer del aeropuerto de El Prat.