Su amor y pasión es el baile y, sobre todo, poder transmitirlo a la nueva generación. Esto hace que Peggy Bousounis, de 19 años de edad, enseñe lo que sabe a las más pequeñitas que dan sus primeros pasos en el ballet.

Peggy se desempeña como asistente en la academia de danza Ileana de Sola y Josefina Nicoletti.

Ella empezó su pasión allí, desde los seis años de edad, y manifiesta que aún tiene un largo camino por recorrer para ser una profesional, que es su sueño.

Pero mientras, para no dejar de bailar, enseña a las pequeñitas de dos años de edad. Peggy asegura que estas niñas son unas esponjitas que lo absorben todo.

Explica que a la edad de dos años a las niñas se les estimulan sus movimientos en ballet, para que cuando entren a la etapa del baile sea más fácil.

"Para mí, el ballet no es un pasatiempo o un trabajo, en mi modo de vida, forma parte de mí, de quién soy". Así se define esta joven bailarina que ha participado en varios musicales de teatro como: "Los Productores", "South Pacific", "Víctor Victoria" y, próximamente, en la obra musical "Mi lugar favorito". "Las obras musicales me encantan porque es completo del trabajo artístico, porque contienen música, baile y actuación", expresó la bailarina convencida de que seguirá perfeccionándose para continuar en ese camino.

Una de las recomendaciones de la bailarina es que las madres deben impulsar el talento de sus pequeñas, así como lo hicieron sus madres. "Muchas veces, desde que observas a las pequeñas, sabes que tienen el don, pero otras lo tienen escondido", manifiesta el joven talento.

Para ella, existe una deficiencia en el sistema educativo, que es la falta de desarrollo artístico en las escuelas; existe un vacío en las artes, la falta de clases de danzas, artes plásticas, teatro, literatura, entre otras. Recalca que se debe ser más profundo en estas materias, como se hace cuando se enseña Matemáticas, Español, Filosofía, estas asignaturas son tan importantes como tener conocimiento en arte.

Llenan todo lo académico necesario, pero dejan atrás las artes, lo que causa que el talento se pierda, sustenta.

Peggy asegura que seguirá enseñando para compartir ese legado que le han transmitido sus docentes de ballet, jazz y tap.