
La enfermedad está distribuida mundialmente en numerosos huéspedes animales.
¿Cómo se presenta?
En el canino se presenta como una infección aguda de riñón e hígado y, a veces, como una septicemia.
La enfermedad crónica renal es una secuela de esta infección y los abortos pueden presentarse en hembras que se encuentran preñadas.
La Leptospira no se multiplica fuera del huésped y su supervivencia depende de las condiciones medioambientales donde se encuentre (suelo, agua).
Es altamente susceptible a la desecación y a los cambios de pH.
Las bacterias de Leptospira sobreviven hasta 180 días en los suelos húmedos, por varios meses en superficies acuosas y sobreviven mejor en agua estancada que en movimiento.
¿Cómo se infecta?
La fuente de infección para animales es por contacto directo con orina y agua infectada, material o fluidos fecales y placentarios, descargas uterinas o por contacto indirecto con el ambiente contaminado (pasto, tierra, ingesta de carne contaminada, etc.).
Los perros jóvenes no vacunados, o cuyas madres no fueron vacunadas, se encuentran en mayor riesgo de enfermedad severa y muerte que podría ocurrir debido a una septicemia aguda o anemia hemolítica.
Mientras, los perros de mayor edad, previamente vacunados, que luego se infectan naturalmente, con una cepa homóloga al serovar de la vacuna, generalmente tienen signos clínicos mínimos.