El quedó desempleado para el tiempo de la crisis. Tuvo la necesidad de buscar un empleo y fue por medio del Instituto de Mercadeo Agropecuario, que le dieron el apoyo a través de un proyecto que se llamó "Feria de Siembra Libre", que estableció su negocio en los alrededores de los multifamiliares Los Libertadores, frente al cuadro de fútbol.

Así fue que inició Félix Lezcano, en el negocio de la venta de legumbres y frutas. Ya son 18 años de ardua faena de este humilde caballero, que ha mantenido su hogar con este empleo y ha logrado educar a sus tres hijos.

Con los cambios de gobierno, dejaron de darle el apoyo de mantenerlos en contacto con los productores para facilitar la compra de las legumbres. Pero con la experiencia adquirida y una clientela estable, ha sabido seguir adelante.

En sus inicios, el negocio era bastante rentable, debido a que la economía era mejor y no había tanta competencia. Ahora, este caballero de 56 años, admite que las cosas son más difíciles, la competencia es mayor, porque este tipo de trabajo es más accesible a los desempleados que aumentan cada vez más.

"En cada esquina, en los semáforos, en carro abundante, se vende legumbres", dijo Félix. Sin embargo, él no deja de trabajar, es optimista, sabe que las cosas mejorarán con el tiempo y además no hay de otra, que seguir luchando.

Trabaja todos los días de 7 a.m., a 7 p.m. Cuando quiere descansar pone a un asistente o a un pariente suyo, a laborar.

Su preocupación es que el gobierno ha querido modificar el manejo de las actividades, y para ampliar el negocio le exigen una licencia comercial para establecerse como microempresas, donde el mínimo de fondos debe ser mil dólares para pagar impuestos y él no cuenta con ese capital. Siempre trata de complacer en la medida de las posibilidades a sus clientes, sobre con los precios.

TEMPRANO

Desde las 6 A.M., Félix está comprando sus productos en el Mercado de Abastos, todos los días.