Cualquiera pensaría que ser una mujer indígena es difícil, pero viéndolo de otra perspectiva no es como parece. Alba Kaysa, una mujer emberá, es una de líderes de la comunidad de Ipetí, en Alto Bayano, Tortí, igualmente es la administradora de una tienda de artesanías propias de su cultura.

Su figura le ha dado importancia dentro de un grupo de mujeres, de quienes se ha convertido en su vocera, cada vez que son invitadas a alguna actividad cultural, ella es la encargada de coordinar.

SUS PINTURAS

Conversando con Alba, descubrimos algunos detalles de la costumbre emberá, por ejemplo que las pinturas que muestran en su cuerpo, asemejan a los animales del bosque. Hay culebras, cruz, cocaíta y más.

A la hora de pintarse, el diseño depende la mujer. En esos momentos, es Alba, quien se encarga de pintar a sus compañeras y al terminar, ellas la pintan a su vez.

Asimsimo, como las pinturas, sus bailes. Esta orgullosa emberá nos explica que hay danzas del tigre, oso, venado y del trapiche.

RECIBE VISITANTES

Además de encargarse de la tienda de artesanías, Alba también se refiere a la casa de cultura, donde reciben a grupos de estudiantes y a visitantes extranjeros.

TRADICIONES

Ellas aprenden y se enseñan, mutuamente, como confeccionar las artesanías.