Se paralizó Calle 50. Todo se encaminaba a que sería un día normal de trabajo, pero a las 10: 29 a.m. de ayer se registró un fuego en los talleres de la empresa Grupo Q.

La desesperación se apoderó de los trabajadores, quienes sacaron los vehículos que estaban en reparación, pero las llamas no dieron tiempo y se extendieron por todo el local consumiéndolo en su totalidad.

Se conoció que los trabajadores de esta concesionaria de automóviles intentaron apagar el fuego, pero fue imposible. A los diez minutos llegaron los camisas rojas, quienes entraron a sofocar el siniestro, resultando un bombero afectado por la inhalación de humo.

Las personas que estaban haciendo diligencia cerca al lugar corrían y trataban de alejarse a pie y en sus carros, pues temían por su vida, ya que muy cerca había una estación de combustible.

Inmediatamente el tráfico vehicular por Calle 50 fue desviado para facilitar la labor de los bomberos, los policías, personal del 911 y del Sinaproc.

Miguel Ángel Robles, Carlos De León y Abdiel Bordónez, todos de 19 años, empleados del local, sufrieron afectaciones por inhalación del humo y fueron trasladados a centros hospitalarios.

Con todo y que había cuatro carros de extinción, las llamas dejaron pérdida total, mientras los bomberos rompían paredes para que el agua entrara. No tenían mascarillas.

Frank Archibold, comandante y primer jefe de la zona, manifestó que combatieron el fuego empezando desde el área central del taller, luego la parte de depósito en donde la cantidad de cartón hizo más difícil la situación. "Abajo había un depósito de combustible", aseguró el comandante.

OTROS AFECTADOS

Los residentes de los edificios Mirador 50 y Caprice fueron desalojados por los camisas rojas, pues el humo tóxico representó un peligro para los moradores.

Luego de cinco horas los 125 bomberos sofocaron el fuego y nuevamente se restableció el tráfico.