AROMA...

El hedor que se siente por el área del estadio Juan Demóstenes Arosemena es insoportable. Al parecer, éste es provocado por una marisquería del sector. El mal olor se extiende hasta más de una cuadra. Los conductores también tienen que soportarlo, especialmente cuando se detienen en el semáforo del estadio en la entrada de Curundú. ¿Qué pasa con Salud que no supervisa y arregla esta situación? Ya los moradores del sector no aguantan más.

BANCAS

Las bancas de la avenida Balboa siguen sufriendo la sinvergüenzura de maleantes que se las roban a pedazos.

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