Granos, ojeras, pequeños vasos capilares, cicatrices... son algunas imperfecciones de la piel a las que se enfrentan las mujeres cada mañana. Sin embargo, fingir una piel perfecta es posible, gracias a algunos trucos correctores que harán que el cutis parezca de terciopelo. Mire estos tips.

CONSEJOS:

Los molestos granos: Para cubrir las impurezas, basta con aplicar una mezcla del corrector que se utilice habitualmente con la base de maquillaje. Pero si se trata de un grano irritado y abultado, es necesario contrarrestar la rojez de la zona. Para ello, basta con utilizar un corrector de color verde aplicado por debajo del maquillaje.

Las ojeras de una mala noche: El corrector es el único producto que puede disimularlas; sin embargo, el truco está en cómo aplicarlo para que parezca lo más natural posible. El tono del producto debe estar siempre uno o dos tonos por debajo de la piel y, además, es preferible que tienda hacia el color amarillo.

Pequeñas venitas y rojeces: Aunque la mejor forma de evitar que aparezcan es prevenir estas situaciones, lo cierto es que con un buen maquillaje, también se pueden disimular. Para contrarrestarlas, lo mejor es utilizar antes del maquillaje una base que tienda al color verde.

Las cicatrices: Con un maquillaje de doble cobertura y un peeling con efectos exfoliantes que renuevan las capas de la piel, podrá disimularlas. Si, por el contrario, son cicatrices más profundas, es más difícil solucionar el problema con trucos de maquillaje.

Lo más efectivo es recurrir a las infiltraciones de relleno, como las que se utilizan para acabar con las primeras arrugas.