Los Santos ganó su séptimo título en la historia de los campeonatos nacionales. (Foto: Anayansi Gamez)
Humberto Cornejo O.
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Salir campeón en este torneo nacional vale la pena, solo hay que sacar la calculadora y sumar los emolumentos que han recibido los peloteros de la provincia de Los Santos para que todos queramos ser beisbolistas.
Es que ayer su visita al Palacio de las Garzas fue muy interesante, pues tuvieron grandes sorpresas, brindadas por el mandatario.
En esta pequeña, pero significativa ceremonia, quedó explícito que la época de los trofeos y muchas gracias quedaron en el olvido.
El bullicio de los peloteros se apoderó del Salón Amarillo del palacio presidencial, al escuchar las palabras del presidente Ricardo Martinelli: "Les vamos a dar 10 mil dólares". Afú, presidente de la liga santeña, no se quedó atrás y ripostó: "Yo también les voy a dar 10 mil".
Asimismo, otra voz tomó valor, se trataba del vicepresidente Juan Carlos Varela, que expresó: "De mi parte, les daré cinco mil dólares".
El grupo no lo podía creer, estaban con la boca abierta, al sumar mentalmente lo que alcanzaba esta cifra, unos 25 mil dólares.
Pero todo no quedó allí, de pronto la ex presidenta Mireya Moscoso anunció: "Les voy a dar cinco mil dólares".
Por un momento, el protocolo del evento se detuvo con la llegada de Aníbal Galindo, quien se bajó del bus con otros cinco mil.
Los presentes aún no reaccionaban, cuando el director del Banco del Desarrollo Agropecuario, Rigoberto Amaya, se apareció y anunció: "Voy a contribuir con cinco mil dólares".
Ninguno de los campeones se lo imaginaba, algunos solo se rascaban la cabeza y otros se encargaban de sumar los ceros del acumulado. Nunca pensaron que en una simple visita a la Presidencia saldrían con 40 mil dólares de su lado.
Pero eso no fue todo, ya que más tarde en otra actividad con un patrocinador, recibieron 12,500 dólares, para hacer un gran total de 52,500 mil dólares.
Esto es un mensaje directo para todas las novenas, para que se preparen al máximo para la próxima temporada pues cada pelotero santeño se embolsó unos 1,250 dólares.