Para que no se los lleve
Poco a poco tratan que el río no se lleve el hogar y que los ancianos estén protegidos. (Foto: Alexander Santamaría / EPASA)

Evidelia Velásquez | DIAaDIA

Ya podrán dormir tranquilos. Uno de los principales problemas que sufren las familias que residen en el sector Este de la ciudad de Panamá, es que debido a la deforestación, los ríos se salen de su cauce, ocasionando hasta pérdidas de vidas humanas.

Esto fue lo que le pasó a los residentes del Hogar de Ancianos Roberto Heurtemate, "Los Años Dorados", quienes estuvieron a punto de que el río Pacora se los llevara.

En algunas de sus crecidas, se llevó los gabiones (jaula con piedras), que protegían al centro dedicado al cuidado de los ancianos.

Pero la solución ya les llegó, la Alcaldía de Panamá, como administradora del centro, ha construido un relleno de más de nueve metros de profundidad, con el objetivo de que las aguas del río se alejen de las estructuras del Hogar.

Otro de los trabajos realizados es un dragado del río en forma escalonada, de mayor a menor, para que cuando crezca el río pierda fuerza y no rompa el muro de contención.

Además, realizan una siembra de bambúes con el propósito de que al crecer y echar raíces, sirvan como amarre y logren, de este modo, que el río siga adentrándose a tierra firme.

Los ancianos de este centro son personas que viven en la ciudad en condiciones infrahumanas, que son recogidas de las calles y llevadas allí para ser alimentadas y recibir atención médica.

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En este centro, residen alrededor de 80 ancianos, la mayoría abandonados por sus familiares. También viven las personas encargadas de cuidarlos.

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