El destino tenía reservado un especial hueco al extremo galés Ryan Giggs, autor del penal decisivo que propició la segunda Liga de Campeones para el Manchester United en el día en el que superó el registro del mítico Sir Bobby Charlton, como el futbolista que más veces ha vestido el uniforme de los red devils.
La leyenda del United encabezó la subida al palco de autoridades del estadio Luzhnikí Moscú. Giggs escoltó al capitán Rio Ferdinand. Al final de la relación de jugadores. Entre las manos de ambos depositó la Copa el presidente de la UEFA, el francés Michel Platini.