Si usted es de las personas que prefiere callar lo que siente por miedo al qué dirán o a la reacción que tengan los demás, lo veo mal amigo lector. Y es que callar lo que piensa o lo que siente sólo lo alejará de las personas que quiere o del destino que desea trazarse en la vida.
Piense que no hay nada mejor en la vida que ser capaces de decir sinceramente lo que siente o piensa. Pero no se preocupe más, hoy le daremos unos consejos y verá que desde mañana no se sentirá más nunca aislado por su actitud.
RECOMENDACIONES
Lo peor es llevar una relación con las personas que lo rodean y no atreverse a decirles lo que piensa de lo que hacen, si es positivo o negativo, dígalo, pero con respeto.
Nunca trate de destacar lo negativo de una persona, aunque no lo diga, recuerde que todas las personas necesitan que se les valore por distintos motivos, no importa si es su pareja, su jefe, su amigo o sus hijos. Recuerde que si usted es incapaz de valorar a los demás, no podrá pedir que éstos lo hagan con usted.
En su relación con su pareja, trate de mantener los sentimientos despiertos. Una forma fácil de hacerlo es decirle a su pareja esas cosas que a veces piensa y da por hechas y jamás las exterioriza. Por ejemplo: "Te queda bien este vestido, hoy te ves más guapo que ayer, me gustas tanto cuando ríes".
Muchas veces usted cree que la persona que tiene a su lado sabe lo que quiere y lo que piensa de él, pero no se deje llevar por la intuición, pues eso no es cierto. Su mejor amigo no sabe que lo es si usted no lo dice, o su pareja no sabe que la ama si no se lo confiesa. Lo que debe tratar de hacer es que siempre haya comunicación y así sabrá lo importante que es decir "te amo", o "te quiero amigo o hijo", siempre.
Es importante que de vez en cuando halague el trabajo de los demás, si en verdad cree que es bueno, y aún más que acepte que hagan lo mismo con usted, sin pensar que es una burla o un "cepillón", quien lo dice.
No se crea el cuento de que los humanos somos los únicos racionales en el mundo, pues los animales también tienen esta capacidad y por eso viven felices, pues a diario se demuestran lo que sienten.
De ahora en adelante, que no le dé pena exteriorizar una caricia, un beso o un qué bien lo hiciste, pues si usted no aprende a hacerlo, los demás harán lo mismo con usted. ¡Practíquelo!
|