Como dueños de lo ajeno, asegura Romelia Koo se encuentran los moradores de la comunidad del Silencio, cruce de Segla, distrito de Changuinola, porque manifiesta están invadiendo propiedad privada. Comenta la afectada que desde hace más de tres años, más de 200 familias de la etnia Naso Teribe han invadido arbitrariamente sus terrenos, provocando serios daños a su propiedad, como la tala indiscriminada de casi 500 árboles, utilizados en su mayoría para la construcción de las viviendas.

El desalojo de estas personas, manifiesta Koo, ha sido solicitado en varias ocasiones, pero explica que la falta de interés ha imposibilitado esta acción. Amparos de garantía en contra de las autoridades del distrito, es la respuesta de la comunidad indígena, que ha retardado, según la propietaria, el desalojo.

Estos terrenos están ubicados en la Finca 5445 del distrito de Changuinola en Bocas del Toro y su fin es para la creación de un complejo eco-turístico, con cabañas campestres y demás facilidades para los visitantes.

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