GENTE COMO YO

Un taxista ejemplar


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Trabaja de sol a sol todos los días.

Fotos: NAYELI WILLIAMS

  • Un taxista ejemplar

    Trabaja de sol a sol todos los días.

    Fotos: NAYELI WILLIAMS

  • Un taxista ejemplar

    La educación ante todo.

  • Un taxista ejemplar

    Siempre sonriente Don Pedro.

  • Un taxista ejemplar

    Siempre atento con el prójimo.

  • Un taxista ejemplar

    Trabaja de sol a sol todos los días.

    Fotos: NAYELI WILLIAMS

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    La educación ante todo.

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    Siempre sonriente Don Pedro.

  • Un taxista ejemplar

    Siempre atento con el prójimo.

  • Un taxista ejemplar

    Trabaja de sol a sol todos los días.

    Fotos: NAYELI WILLIAMS

  • Un taxista ejemplar

    La educación ante todo.

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    Siempre sonriente Don Pedro.

  • Un taxista ejemplar

    Siempre atento con el prójimo.

  • Un taxista ejemplar

    Trabaja de sol a sol todos los días.

    Fotos: NAYELI WILLIAMS

  • Un taxista ejemplar

    La educación ante todo.

  • Un taxista ejemplar

    Siempre sonriente Don Pedro.

  • Un taxista ejemplar

    Siempre atento con el prójimo.

  • Un taxista ejemplar

    Trabaja de sol a sol todos los días.

    Fotos: NAYELI WILLIAMS

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    La educación ante todo.

  • Un taxista ejemplar

    Siempre sonriente Don Pedro.

  • Un taxista ejemplar

    Siempre atento con el prójimo.

Redacción - DIAaDIA

Un gran hombre. Son las 2:00 p. m. cuando el incandescente sol de la tarde golpea el taxi del señor Pedro Espinoza, quien desde tempranas horas del día sale a “ruletear” para llevar el sustento a su casa. Con una gran sonrisa y buen humor charla con los usuarios diariamente, a fin de sobrellevar la molestia de estar diariamente metidos en los tranques de la ciudad capital.

Se siente satisfecho

El hombre de 58 años asegura sentirse bien, debido a que sus tres hijos ya son personas profesionales, dirigidas por el camino del bien; sin embargo, no por esto deja de ser una persona activa, que trata de salir adelante recorriendo las calles de la metrópolis.

 

No es difícil

A diferencia de muchos de sus colegas, Pedro afirma que la labor de taxista no es difícil, más bien se requiere de paciencia. Asegura que hay conductores que deben tratar mejor al usuario, es necesario tener tolerancia para que de esta manera evitar confrontamientos con los clientes. La cultura del “no voy”, debe erradicarse, reiteró.

 

Polifacético

Pese a ser un experto en el volante, Pedro asegura que tiene trabajando como taxista dos años y medio, antes se dedicaba a la fotografía, su talento lo llevó representar a Panamá en múltiples coberturas. Agregó que la fotografía es su pasión, pero que lastimosamente la paga que se le da a los expertos de la cámara no es la adecuada, por eso la dejó.

 

Este humilde hombre sale de su casa a eso de las 7:00 a. m. y regresa a las 6:00 p. m., no trabaja de noche debido a que los peligros de la calle que cada vez se acrecientan.

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