Con el inicio de la estación lluviosa, gran cantidad de familias en Cerro Punta siente temor, puesto que las pasadas inundaciones del mes de enero causaron el desvío del río Chiriquí Viejo que pasa muy cerca de sus residencias, donde incluso arrasó con parte del terreno donde están sus casas.

Aproximadamente, 12 familias de las comunidades de Guadalupe y Bambito han quedado con sus residencias muy cerca de las afluentes del río, además de dos puentes que fueron declarados en peligro por el Sistema Nacional de Protección Civil en un informe realizado.

La solución del problema es la canalización en varios sectores del río, lo que le corresponde al Ministerio de Obras Públicas; sin embargo, en una visita que se realizó a la Secretaría General de este ministerio, fue enviado a la Dirección Nacional de Mantenimiento donde argumentan que tienen las intenciones de realizar el trabajo, pero no cuentan con el recurso.

La comunidad también tiene todas las intenciones de ser parte de la solución, aportando incluso recursos económicos para que el MOP efectúe los trabajos lo antes posible.

El señor Concepción Rovira, dueño de una de las residencias afectadas donde vive en compañía de su esposa y sus cuatro hijos en la comunidad de Guadalupe, manifestó que en las inundaciones del mes de enero, el río arrasó con parte del terreno trasero de la casa y unos animales que estaban allí.

Detalló que el río pasaba mucho más atrás de su casa, pero con las crecidas ha quedado a muy pocos metros de la misma, lo que los tiene a la expectativa ahora que ha empezado a llover todos los días.

"Cada vez que el río crece, tenemos esa angustia de pensar que nos llegue a pasar algo", aseguró el campesino.