Cumplieron lo prometido y protagonizaron tremendo zaperoco. Ayer, los copropietarios de la Casa Miller cerraron los portones del residencial para evitar el desalojo de dos hombres que viví­an solos. Para cumplir con la orden de lanzamiento, fue necesaria la presencia de unidades policiales para poner orden en el lugar. Y como el ambiente se tornó tenso, hubo uniformados que lanzaron gas pimienta contra los manifestantes, pero éstos procedieron a colocar barricadas en la calle y a lanzar objetos desde los balcones del residencial.

Algunos residentes, visiblemente molestos, dijeron que eso afectó a muchas personas discapacitadas que estaban observando.

Este enfrentamiento dejó a tres personas detenidas.

Virginia Miranda, directora nacional de Desarrollo Social del Ministerio de Vivienda, informó que en un principio, eran cinco familias las que desalojarí­an, pero se llegó a un acuerdo con las otras tres. Solicitó al resto de los moradores colaborar con un cambio de actitud. "Los apoyamos a ellos, porque los conocemos y aunque cometieron su error, no hay por qué echarlos a la calle", expresó una de las vecinas.

ADVERTENCIA

EL MIVI reiteró que no podrán permanecer en sus proyectos aquellas personas que no cumplan con la buena conducta y no opten por un cambio de actitud.