Llena de sueños. Bajo el fuerte sol del mediodía, Olga Lucía Rodríguez se dispone a vender sus deliciosos "hot dogs- en los alrededores del centro comercial La Doña, en la 24 de Diciembre.

De nacionalidad colombiana, esta mujer afirma que este es un nuevo negocio para ella, y que en ningún momento se vio vendiendo comida en la calle. A diferencia de lo que otros dicen, ella afirma que si uno se esfuerza, la venta de "hot dog- puede llegar a ser rentable, siempre y cuando se tenga la disposición de hacer las cosas bien.

LA SONRISA

El que da cariño recibe cariño, este es el caso de Olga, quien a sus 43 años se ha ganado el respeto de los demás comerciantes, que ven cómo cada día adquiere mayor clientela. El secreto de su éxito es ser siempre amable y cordial.

Afirma que uno nunca sabe cuando una persona necesita una palabra de aliento o simplemente una sonrisa que lo haga olvidar por un momento los problemas que lo aquejan.

MOTIVO DE LUCHA

A pesar de vivir con su pareja, asegura que el motor que la hace seguir adelante es su hija. Sueña con verla graduarse y convertirse en toda una profesional.

JORNADA

Son las diez de la mañana cuando Olga se dispone a arreglar su carrito. Minutos más tarde empieza la venta de sus esperados "hot dogs-. Asegura que hay días buenos en los que las personas tienen mucha hambre y necesitan un 'refrigerio', pero hay otros en que las ventas son bajas

ANHELOS

Al igual que otros empresarios, Olga sueña con tener un negocio más grande, en el cual pueda brindar un mejor espacio a su clientela y tener una mejor variedad de productos.

Sostiene que por medio de esta actividad espera obtener lo suficiente para ver su sueño hecho realidad.

¡PRUEBELOS!

Los "hot dogs- grandes están a 75 centavos. Los chicos los vende a 60 centavos.