En sus ojos hay arrepentimiento. Su rostro angelical refleja dolor y sufrimiento. Su alma sólo quiere desahogarse. Esto fue lo que hizo Rosa Pimentel, de tan sólo 18 años, con DIAaDIA. Esta joven ha vivido una vida dura, llena de malas experiencias.

Fue en su natal Penonomé que cayó en el oscuro mundo de las drogas. "Cuando mis papás recién se separaron, yo entré al cuarto de mi papá y él estaba "ruliando marihuana", me ofreció y así fue que comencé". Desde los 11 años, la pequeña Rosa entró en las drogas; trató de dejarlo, pero al morir su padre ingresó nuevamente, y no fue hasta el año pasado cuando entró a Hogares Crea Femenino, en donde encontró una "salvación".

"Yo viví con mi hermano por varios años, y con él recaí. Vendíamos y consumíamos marihuana y cocaína, y hasta piedra". Con las ventas, dice Rosa, hacían buena plata, pero cada vez más se hundía, e inclusive tuvo problemas judiciales. La primera vez que la detuvieron fue a los 16 años, cuando la encontraron con 20 bultos de marihuana, pero la soltaron el mismo día, ya que era menor de edad. Después de esa vez, hubo más casos, uno de ellos fue cuando estaba bajo los efectos de la droga y le disparó a un sujeto en la pierna. Al ingresar a Crea se dio cuenta que ella no tuvo la culpa de su pasado. "Si yo no hubiera entrado (a Hogares Crea) no sé que sería de mí, yo veo a los piedreros y veo mi futuro reflejado en ellos, por eso voy a ingresar esta semana, porque quiero que mi vida cambie". Esto fue confirmado por Hogares Crea.

TOCO FONDO

Rosa Pimentel estuvo muy cerca de la muerte en dos ocasiones, cuando le dieron dos sobredosis.