La que tiene a todo el mundo alarmado es la supermodelo alemana Claudia Shiffer, quien apareció en Cannes, y nada más es hueso.
Sí, como les cuento, la modelo que reinó en las pasarelas de todo el mundo en la década de los 90 luce ahora demacrada. Según la prensa europea, Shiffer, que mide 1.80 metros, debe tener un peso por debajo de los 49 kilos. ¡Qué barbaridad!
La modelo, que el año pasado dio a luz a su tercer bebé, perdió kilos muy rápidamente, tras el nacimiento de la pequeña Cosima. Pero hoy resulta demacrada: «Se nota que adelgazó de forma veloz, sobre todo por la piel flácida en sus brazos y por el aspecto demacrado de su rostro», explicó el nutricionista Majid Ali, a la popular web de cotilleo RadarOnline.