“Tuvimos que cancelar el concierto en Indonesia”, escribió la cantante de 26 años a sus seguidores en Twitter tras los temores sobre la seguridad de la intérprete y la de sus "pequeños monstruos", o admiradores, si continuaba con los planes de su presentación.
Imagínense que miembros del Frente de Defensores Islámicos dijeron que los vestuarios sensuales de Lady Gaga y sus bailes provocadores corromperían a la juventud. Aseguraron que se presentarían por miles en el aeropuerto si la cantante llegaba al país. Otros dijeron que comprarían boletos para hacer desmanes dentro del estadio, con capacidad para 52 mil asistentes donde se realizaría el concierto en Yakarta, mismo que fue vendido en su totalidad.
Culpan a la Policía
Algunos admiradores acusaron a la Policía, que se negó a otorgar el permiso para la cantante por seguridad, de rendirse ante la voluntad de un pequeño grupo de intolerantes.
La cantante ya había tenido problemas en Filipinas, Corea del Sur y ahora en Indonesia.
¡Ah! saben qué, ella se presentará a principio de noviembre en Bogotá.