Él salió prácticamente expulsado de nuestro país, manifestó Héctor Endara, coordinador de la Pastoral Social de Cáritas Panamá. Endara cuestionó la injusta salida del misionero español Francisco Aperador, y la forma confusa de cómo se llevaron los trámites por parte de Migración. Señaló que éste no es el único caso. Dijo que esta entidad, al extender las visas de misioneros o misioneras, hace firmar documentos a los religiosos, donde se comprometen a no participar en actividades de movilización. En el caso del misionero Aperador, no se hará ningún trámite para que venga otra vez. Sin embargo, se redoblará la labor como iglesia y la exigencia que se tiene para garantizar la lucha campesina. El mensaje es claro, "se nos golpea por el trabajo social realizado", dijo. La ACP tiene influencia económica y política, recalcó.