Mostró su casta de campeona. La francesa Mary Pierce, de 30 años, ganadora de Roland Garros en el 2000 ante Conchita Martínez y finalista en 1994 contra Arantxa Sánchez Vicario, mantuvo el orgullo francés al vencer ayer a la estadounidense Lindsay Davenport y alcanzar las semifinales.

Pierce se impuso por 6-3 y 6-2 a la jugadora americana que tuvo suerte ayer, pues la belga Justine Henin-Hardenne venció en la misma ronda a la rusa Maria Sharapova y le evitó así perder su condición de número uno del mundo.

Pierce fue capaz de dominar a Davenport por 5-0 en el primer set y, al final, logró imponerse en una hora y 21 minutos. "Estoy sorprendida", comentó Pierce, 21 cabeza de serie. "No pensaba ganar este partido tan fácilmente como lo hice. He derrotado a la número uno del mundo y en dos sets", dijo.

Davenport, la única representante americana que quedaba en el cuadro, notó el cansancio acumulado en sus cuatro anteriores encuentros, todos ellos a tres sets.

"Lo primero es la decepción (...) Estoy contenta de que la temporada en polvo de ladrillo haya terminado", afirmó Davenport, a quien no le gusta jugar en tierra batida.

Davenport sucumbió totalmente ante el juego de la francesa, poniendo así fin a sus esperanzas de ganar el único torneo de Gran Slam que hasta ahora siempre se le escapó, ya que su mejor resultado en el Abierto Francés fue disputar una semifinal en 1998.

El partido de ayer era el undécimo duelo que Davenport y Pierce protagonizaban a lo largo de sus respectivas carreras. Los anteriores diez enfrentamientos acabaron a favor de la estadounidense en ocho ocasiones y con victoria de la francesa en sólo dos.

PROXIMA RIVAL

La jugadora francesa, Mary Pierce, se enfrentará en semifinales con la rusa Elena Lijotseva, que derrotó a la búlgara Sesil Karatantcheva.