Propietarios y empleados de funerarias reconocidas del país, entre ellas: Alfa y Omega, Leblanc, María de Las Mercedes, Cristo Rey y María Auxiliadora elevaron una delicada acusación ante el subcomisionado de Arraiján, Rigoberto Rivera, en contra de unidades que supuestamente se dedican a realizar llamadas telefónicas desde la institución, para favorecer a una funeraria a cambio de prebendas.

Los denunciantes realizaron una caravana con las carrozas fúnebres, hasta la estación de policía. Luego se reunieron con Rivera.

Rivera ordenó la detención de uno de los empleados de la funeraria Alfa y Omega, tras confesar que llamó a la policía, reportando un caso de muerte en Bique para comprobar la veracidad de sus acusaciones. Efectivamente, detrás del patrulla iba la carroza de la funeraria "Con Amores". Manuel Medina, representante de la funeraria, negó la acusación y dijo que durante 5 años ha prestado un servicio eficiente.