¿Quién dijo que cuando nos caen los años debemos quedarnos con los brazos cruzados? Tal vez esa excusa la ha escuchado de alguien cercano a usted, pero hay muchas personas que aunque físicamente sean adultos mayores, se sienten jóvenes de espíritu.
Pues bien, Julio César Castillo tiene 71 años, es un albañil jubilado y a pesar de que su vida laboral no fue nada fácil, no quiere estar de balde en su casa.
Es una persona llena de creatividad y entusiasmo. Imagínese que en sus ratos de ocio se las ingenia para elaborar estatuillas de animales hechas en madera.
Julio César es oriundo de Penonomé, pero actualmente reside en la barriada Arnulfo Arias en Pacora. Su hogar es muy acogedor y pintoresco.
Tiene en la esquina de su patio una toldita y en la mesa de centro reposa una cabeza hecha en madera de nance, y aunque no dijo en quién se había inspirado ese busto, sus vecinos y amigos aducen que es él.
Por otro lado, en el portal de su casa y en cada esquina del patio de su residencia hay algún detalle hecho por las manos de Julio César. Entre ellos, pajaritos de calabaza, peces, lagartos, ballenas, cocodrilos y otros diseños que ve en la televisión.
Este amigable señor recalcó que en un principio no elaboraba estos adornos para venderlos, sino que los diseñaba para aprovechar el tiempo. No obstante, ahora piensa que si los compraran él seguiría produciendo más, con mayor calidad y a precios accesibles.
Castillo dijo a DIAaDIA que su próximo trabajo es hacer una cabeza de venado y aunque ya tiene la cornamenta, le falta buscar la madera y ponerse manos a la obra.
DE SU VIDA
Julio César tiene 18 hijos, está feliz y contento de las cosas que aún puede hacer por su vida y por los demás.
|