El sistema que Jürgen Klinsmann ha querido imponerle a Alemania, parece funcionar ya a menos de una semana del partido inaugural del Mundial contra Costa Rica, y los días que quedan serán dedicados a afinar algunos detalles especiales.

"Lo más importante es que hemos cerrado estas dos semanas de preparación con una experiencia positiva, y ahora vamos con la cabeza alta al partido inaugural", dijo Klinsmann tras la goleada por 3-0 que propinó su equipo el viernes a Colombia, en la mejor presentación germana desde la Copa de Confederaciones.

Klinsmann le restó importancia a que en otros amistosos, como el empate a dos goles ante Japón, el equipo no hubiera dado la misma buena impresión que ante Colombia.