La Selección de las barras y las estrellas cayó en la final de la Copa Oro anterior ante el conjunto de México 5 goles por 0.
El equipo de casa, Estados Unidos, pasó de ser un seleccionado en crecimiento y quiere estar entre los llamados grandes. En los últimos meses, el grupo dirigido por Bob Bradley se ha enfrentado en partidos de fogueo contra grandes seleccionados como Brasil, Argentina y España. Los jugadores estadounidenses se han consagrado en importantes equipos de Europa y ya no es frecuente su incredulidad ante la prensa y aficionados, quienes antes dudaban de su nivel.
Sin embargo, y a pesar de situarse primeros de la Concacaf en la clasificación de la FIFA, hay una estaca clavada en la afición norteamericana por cobrar: la pasada final de Copa Oro la perdieron por goleada (0-5) con México. Llegó la oportunidad de borrarla con un título y Canadá es el primer rival del equipo de las barras y las estrellas en esta edición de la Copa Oro.
Históricamente, estos equipos se han enfrentado tres veces dentro de la Copa Oro. Un empate y dos victorias le dan la ventaja a Estados Unidos.
Pero Canadá no se quiere quedar atrás y viene haciendo su propia historia en este torneo. Ya en el año 2000, fueron campeones venciendo a Colombia (quien asistió como invitado). Desde entonces el fútbol canadiense ido en ascenso y ha adquirido respeto en el área, a pesar de haber podido repetir título. Los de la hoja de maple han ocupado terceros lugares en el 2002 y 2007 (no se jugó el partido y se compartió el lugar con Guadalupe). Los canadienses no vienen de paseo a Estados Unidos y estos serán los primeros en comprobarlo.