Hay que ver que Marc Anthony va de mal en peor en su vida, desde que decidió volver a revolcarse con Jennifer López.

¿Por qué? Pues, parece que no le dio pena con sus hijos ni con nadie divorciarse y casarse cuatro días después, y lo peor, que lo casaran hace unos años por "un órgano". No es cuento, nos enteramos de que el artista le prometió al padre Ricky Gerena, de la Catedral de San Juan, Puerto Rico, un órgano que le costaría 75 mil dólares, solamente por casarlo con la ex Miss Universo.

Ahora se dice que por andar de caliente, la luna de miel concluyó, ya se divorciaron y el órgano no ha llegado. Pero, ¿saben qué es lo peor? Bueno, que al parecer, volvió a prometer otro órgano para casarse otra vez y darle gusto a Jennifer. ¡Pobrecito!