Procure no ser tan cochino, pues si no se vertiera tanta basura a la bahía de Panamá, otro gallo cantaría.
Ayer, funcionarios de la Dirección Municipal de Aseo Urbano y Domiciliario recolectaron en esta zona más de 2 mil 648 toneladas de basura, entre llantas y escombros. Además, realizaron una fumigación para erradicar los criaderos de mosquitos Aedes Aegypti y Albopictus.
El alcalde Juan Carlos Navarro reiteró a la ciudadanía, no arrojar chatarras y otros desperdicios a los ríos y quebradas, pues es una de las causas de desastres, como las inundaciones del 2004.
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