¡Pobrecito! El príncipe Carlos está triste, pues por motivo de un resfriado que arrastra desde hace un mes, ha tenido que cancelar su presencia en las carreras de Ascot por prescripción médica. ¡Ayyy! El heredero de la corona británica deberá tomar tres días de descanso y no podrá asistir a las famosas carreras, que se celebran la próxima semana. ¡Uyy!