Ni las Vírgenes se salvan de los facinerosos, que cada vez se propagan más en nuestra ciudad. Esta vez, le tocó a la Virgen de la Parroquia San Pedro de Isla Taboga, y no es la primera vez que le roban. Hace 10 años le robaron la corona de oro con diamantes y le tuvieron que comprar una corona de fantasía en la ciudad para que no se notara la diferencia. Aproximadamente, hace 3 semanas se dieron cuenta de la desaparición del escapulario de la Virgen y nadie sabe cómo desapareció. Las ofrendas y mandas dadas por los pobladores y por seguidores de esta Virgen, que en su mayoría son accesorios de valor, también fueron desapareciendo poco a poco y es tanto que todas las ofrendas fueron quitadas del altar, por temor a que sigan cayendo en manos de los "delincuentes sin corazón", como los llaman sus pobladores.

Por ahora, la Policía realiza una investigación de estos hurtos, ya que no es fácil introducir estas joyas en el mercado sin tener un contacto, para así acabar con esta profanación a la Virgen tabogueña.

GUARDADAS

Supuestamente, algunas prendas que le han regalado a la Virgen por mandas, las tienen guardadas y no se han perdido como las otras.