[
Imprimir]


Una gran responsabilidad
Recuerde que es su responsabilidad.

Luis Trujillo | DIAaDIA

Raúl tiene 29 años y tiene dos hijos: una niña de 11 años y un niño de siete. A sus 18 años, tuvo a su pequeña reina como le llama a unos de sus tesoros. No sólo eso, a los tres meses de haberse graduado de secundaria se convirtió en padre.

En ese entonces, pensó que el mundo se le venía encima, no tenía derecho a pensar en la universidad para mantener una pareja y, por supuesto, a ese bebé que venía en camino.

Raúl no lo dudo, dejó muchas cosas a un lado por su familia. Luchó y hasta el día de hoy, lucha constantemente para darle a los suyos lo mejor de la vida.

"Fue muy duro, pero lo hice porque amo a mi familia. Hoy las cosas son diferentes, los niños están grandes y me da más libertad para hacer otras cosas. Hoy puedo estudiar para superarme y así ayudarlos más", nos dijo Raúl, quien ve a sus hijos como sus mejores amigos.

Esta historia tiene un final feliz.

A diferencia de Raúl, la realidad de otros jóvenes es diferente, muchos son los que a la hora de convertirse en padres le huyen a la responsabilidad, esto se debe a que muchos de esos pequeños no han sido planeados. Según el psicólogo Abigail Velásquez, esta es una realidad que se vive a menudo, muchas de estas paternidades jóvenes caen en la irresponsabilidad porque no tienen un empleo, una profesión que puedan respaldar la crianza de un niño. Lo que provoca que sean los abuelos quienes se hagan cargo de esto, ocasionando un problema más grande, porque entonces se desentienden de sus obligaciones como padres.

Añade el experto que por falta de una política de estado con la que se oriente a los jóvenes es que muchos caen en estos problemas, los cuales se agravan debido a que los padres jóvenes no tienen la capacidad económica, mental, ni psicológica, para enfrentar la responsabilidad que representa ser padre.

Pero todo no está perdido, si tú eres un padre joven, existen algunas sugerencias para que le hagas frente, eso sí, aunque no existe un librito mágico que te diga cómo conducirte, se te puede ayudar.

Empieza buscando orientación si no estás preparado, puedes asistir a la Caja de Seguro Social, hay un programa para padres y madres jóvenes, el cual ayuda cómo manejarse.

Otra de las cosas que puedes hacer es buscar el apoyo de tus familiares más cercanos (padres) para que ellos te guíen, recuerda que aún no has madurado y ellos te pueden aclarar más el panorama.

Y lo más importante, debes tener presente que esa criatura depende de ti y que es responsabilidad tuya, por lo tanto, debes ayudarlo económicamente.

Por último, recuerda que un hijo no es impedimento para que sigas estudiando o desarrollándote, pues con un buen planeamiento de tu tiempo puedes cumplir con todas tus obligaciones.





Ciudad de Panamá 
Copyright © 1995-2008 DIAaDIA-EPASA. Todos los Derechos Reservados