El cadáver que encontraron el miércoles en Hato Montaña corresponde al de una mujer, y la noticia es que no fue descuartizada.

¿Cómo entonces la metieron en esa maleta donde la encontraron? Un poco difícil: en posición fetal.

Se trata de una mujer de aproximadamente 30 años de edad, quien presentaba dos impactos de bala, una en el pecho y otro en la pierna izquierda, según revela el informe forense.

Según el inspector Wilfredo Hurtado, de la Policía Técnica Judicial (PTJ), se trata de una mujer de tez trigueña, cabello color caoba y un metro 65 centímetros de estatura, contextura gruesa y que vestía una blusa sin mangas de color amarillo.

Sólo un 85% del cuerpo de la mujer se encontraba dentro de la maleta de color negro, dejando gran parte de la cabeza fuera.

Las huellas dactilares de la mujer servirán para lograr su identificación, añadiendo que debido al estado de descomposición del cuerpo, resulta difícil establecer si la misma había sido abusada sexualmente. Con las huellas dactilares, tratarán de identificar a la víctima.