Roberto "Manos de Piedra" Durán no cambiará nunca. Anoche, a su llegada al aeropuerto de Tocumen, dio un tiempo a la prensa para chistear y dar gracias al pueblo panameño.
Pero el más grande boxeador latinoamericano de todos los tiempos, también dijo estar asustado por el cariño que le profesa el pueblo panameño y por la gran cantidad de gente que lo fue a recibir a la terminal aérea.