Es una realidad. Unos 51 mil niños laboran en Panamá y en su mayoría son de las comarcas y áreas costeras.
Briceida Barrantes, representante de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), detalló que las actividades de pesca y agrícolas son las más abarcadas por los menores.
Expresa que en todo caso la peor parte la llevan los menores, pues peligra su integridad física, emocional y su futuro se ve truncado.
Es por eso que a criterio de Barrantes, no sólo una institución debe ayudar a erradicar este problema, sino toda la sociedad.