Contra la pared. El ala-pívot de los Lakers de Los Angeles Pau Gasol admitió que a su equipo le costó "carísimo" haberse confiado tras ir ganando por 24 puntos (45-21 en el segundo cuarto) un partido que finalmente acabaron cediendo por 91-97 y que deja a los Celtics de Boston a un paso del título.
"El resultado nos deja en una posición muy difícil para remontar aunque la Final no está perdida, hay que sobreponerse".