En las aulas de madera las condiciones no son las más seguras para los niños. (Foto: JESÚS SIMMONS)
Jesús Simmons
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Quieren las llaves. Cansados de que sus hijos tengan que recibir clases en salones de madera llenos de huecos, provocó que los padres de familia de la Escuela Santa Fe, ubicada en Cabra, 24 de Diciembre, salieran a la calle a protestar.
Ayer, los enfurecidos padres reclamaban que la nueva escuela ya está terminada y el Ministerio de Educación (MEDUCA), no quiere hacer la entrega de las instalaciones.
Como medida de fuerza decidieron que no enviarían a los niños a la escuela esta semana, hasta que el MEDUCA no haga entrega de la nueva escuela, ubicada en la barriada Santa Isabel.
Manifestaron que la excusa que les dieron los funcionarios del MEDUCA para no entregar el plantel es que la energía eléctrica no ha sido instalada y que el Benemérito Cuerpo de Bomberos de la República de Panamá no ha dado el visto bueno de ocupación.
Expresaron que llevan seis años con el mismo problema en las aulas de madera que han servido de escuela y que ya no están dispuestos a seguir esperando.
Por su parte, María Elena Gil de Montaner, directora regional de Educación de Panamá Centro, explicó que ya se les dijo a los padres de familia que deben tener paciencia, porque falta la luz y el permiso de los Bomberos. Agregó que van a presionar para ver si la otra semana pueden entregar la nueva escuela.
ESCUELA
La nueva escuela tiene un costo de 1 millón 475 mil dólares. Posee tecnología de punta para los estudiantes.