Aunque el jefe del Ejecutivo invitó al diálogo nacional, los cierres de calles y los gases lacrimógenos no faltaron ayer.
Estas acciones dejaron 59 personas detenidas, de ellas 27 en la ciudad capital y 32 en la provincia de Colón.
A partir del mediodía, obreros del SUNTRACS colocaron barricadas de basura y piedras y quemaron llantas en todas las vías. Esto ocasionó un enorme tranque y el disgusto de los panameños que por allí transitaban. Más tarde llegaron unidades de Control de Multitudes, y a punta de gases lacrimógenos se logró dispersar a los manifestantes y se restableció el flujo vehicular. No obstante, estas acciones afectaron a muchas personas que sentían ahogarse por los gases. Algunas de ellas quedaron atrapadas en los diablos rojos y tuvieron que salir en estampida; otras hasta vomitaron y no encontraban agua para aliviar el efecto de las ráfaga de gases.
Durante estos disturbios, los buhoneros abandonaron sus puestos, los almacenes cerraron sus puertas y hasta una de las paqueteras de El Machetazo de San Miguelito quedó a la deriva, pero no se reportaron saqueos. Según la Policía Nacional, durante estas acciones en la capital y Colón se decomisó a los manifestantes 40 bombas molotov, 108 fragmentos de hierro de diversos tamaños, 91 de éstos con el propósito de reventar neumáticos, 225 canicas, una máscara antigás y dos biombos.
DETENIDOS
De los 27 detenidos en la capital, 4 eran menores. También fue detenido el colombiano Eutimio Vanegas.
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