La máscara es una de las partes del atuendo del Diablico Sucio que más impresiona, por su forma y por el trabajo que conlleva su realización. Una vez decidido el diseño, se hace el molde de arcilla; para ello, se utiliza tierra de arriero.

Realizado el molde, se forra con varias capas de papel, dejando secar al sol cada capa. Cuando seque la última capa de papel, se procede a darle el toque final agregando elementos que permitan configurar la máscara, como los dientes, ojos, cuernos y, finalmente, es pintada con colores vibrantes.