"Siempre tuve la agilidad de soldar muy bien", comentó José Murillo, al sentirse orgulloso de su trabajo. Él es un joven padre que todos los días se levanta temprano a trabajar y conseguir el sustento de dos hijos.
"Desde que tenía 17 años empecé a soldar, porque lo aprendí en el Instituto Tomás Alba Edison, donde me gradué", comentó
José vive en el distrito de La Chorrera y dijo que desde que salió de la escuela siempre ha laborado. "Las personas siempre me buscan para que les haga cualquier tipo de trabajo y sin pensarlo voy", narró.
PELIGRO
José se la pasa soldando sobre las carriolas, haciendo verjas o puertas de hierro en distintas partes.
Aseguró que gracias a su trabajo puede educar a sus hijos: uno está en segundo año y el otro en primaria. "Me agrada ver cómo salen adelante mis hijos y espero ayudarlos hasta donde pueda, si ellos deciden ir a la universidad, con mi trabajo de soldador pretendo hacerlo", dijo José.
MENSAJE
Existen muchas formas de ganarse la vida honradamente y más si hay que llevar el sustento a los hijos, destacó José.
DONES
Pero es que José no sólo es soldador, en su vida ha tenido que hacer de todo un poco. "Siempre que voy a algún lugar trato de aprender".
En varias ocasiones ha tenido que trabajar de ayudante de albañil, la cosa es que no queda parado, siempre busca honradamente el dinero.
José comentó que sabe hacer puertas de hierro y verjas y que el precio de las mismas depende de cómo la quieren las personas, porque hay muchos diseños, pero una buena puerta sale en B/200.00.
Siempre con él está su máquina de soldar, máscara y barras de soldadura.
BENDICIONES
Siempre me esfuerzo en cada trabajo que hago. Será por eso que las personas me buscan, dijo José.