"Tía, ore mucho por mí, porque sé que yo no le estoy sirviendo a Dios ni a Jesucristo, yo ando en un peligro grande".

Esas fueron las últimas palabras que, con melancolía, recordó la señora Mariana Mitre Mendoza, tía de Leovigilda "Gilda" Cárdenas, quien dijo que su sobrina se despidió de ella hace dos días cuando llegó hasta su casa, como si presintiera que le iba a pasar algo.

"Me pidió que orara por ella y después de decirme eso, me dio un abrazo", aseguró.

La tía Mariana ahora entiende que este encuentro fue la despedida de su sobrina, porque ella siempre le andaba hablando de Dios para que orara y no se alejara de ella, en esta vida de viajes constantes que tenía que hacer.

Hoy, un gran pesar embarga a los familiares, amigos y seguidores de Gilda, después de conocer su inesperada muerte. El pueblo tableño se viste de luto y reflexiona sobre el conjunto Plumas Negras, que parece tener un destino trazado alrededor de las fiestas de Santa Librada, que son el próximo 20 de julio.

Elías García, primo de la cantante, afirmó que parecía que su prima estaba presintiendo algo, porque además, ya había dicho que estaba pensando retirarse del conjunto, pero su amor por la música se lo impedía.

PESAR

El locutor y animador de bailes, Kenny Alexander Pérez, dijo que le llama, poderosamente, la atención que los meses de junio y julio se han convertido en los más pesados para la maquinaria Plumas Negras, ya que primero muere Victorio Vergara, luego Pacha González, el sobrino de Nenito Vargas, posteriormente Regino Delgado Rey y ahora su vocalista.

Recordó a la cantante como una persona entusiasta, con un buen sentido del humor que transmitía al público en tarima y en los espacios de descanso durante los festivales bailables.

El músico típico Simón Sánchez, conocido como "Ñato Monga", dijo que esta despedida sorpresiva deja un gran vacío en la música típica panameña, manifestando que ella vivió mucho tiempo en una casa cercana a la suya en Guararé.

La casa de la cantante en Las Tablas Abajo, donde se había mudado recientemente y hacía trabajos de rehabilitación, permanecía cerrada, ya que sus hijos y varios de sus familiares viajaron a tempranas horas de la mañana hasta la ciudad de Colón.