Tony corrió con la mala suerte de ser golpeado en uno de sus ojos. Fíjense que la retina del jugador de baloncesto francés resultó dañada. Un incidente que lo ha obligado a guardar reposo durante al menos siete días. ¡Ohh!
“Estaba tan tranquilo con mis amigos cuando, de repente, estalló la pelea. Empezaron a lanzar botellas. Intenté proteger a mi novia y yo me llevé la peor parte. Tenía la camiseta llena de sangre. La retina está afectada. No puedo hacer nada durante siete días. Tengo que llevar un lente terapéutico y echarme gotas”, aseguró el deportista galo.