"Mi nombre es Adriana Aimee Grenald Urriola nací el 29 de noviembre de 1979 tengo 25 años soy madre de 4 hijos, la mayor tiene 9 años y la otra tiene 4 años los menores son de 1 año y 7 meses y el bebé que tiene un mes".
Así, textualmente, comienza su confesión, plasmada en una carta enviada a DIAaDIA, Adriana, aquella mujer que saltó a la palestra pública cuando su bebé recién nacido fue hallado con quemaduras en la cara, pecho y manos en el fondo de una letrina donde ella misma lo había dejado la noche anterior.
Y SIGUE:
"Soy una mujer común mi esposo cuando yo tenía 4 meses de embarazo de mi hijo Adrián me abandonó por una colombiana yo empecé a andar con él cuando estaba bien jovencita y quedé embarazada de mi hija de 9 años a los 16 años tuve mi niña y en ningún momento me pasó por la mente hacer un aborto.
Yo quería mucho al padre de mis hijos y nosotros nos seguíamos viendo hasta que yo le puse una pensión por las dos niñas, ya que Adrián no estaba reconocido todavía, y entonces yo pasé a ser la mala.
Pasaron los meses y yo empecé a tener dolores en el estómago, fiebre, reflujo, mal paladar y se me inflamaba el estómago. Le dije al doctor los síntomas y que el periodo me estaba viniendo irregularmente. Me dijo que eran puras heces que yo tenía acumuladas. Nunca me hice una prueba de embarazo pero pensé en la posibilidad de estar embarazada aunque a la vez no lo aceptaba yo sentí que me había defraudado a mí misma, a mis hijos y a mi familia.
El sábado 7 de mayo me empezó a bajar como sangre. El domingo 8 de mayo me empecé a sentir mal me daban muchas ganas de ir al baño y no eran dolores de parto en la noche fui de nuevo eso es bien oscuro es un servicio de letrina donde puede haber cualquier bicho, y en el servicio no hay foco le dije a mi hija la mayor que me diera una hoja de papel periódico y fósforo; yo prendí el papel lo pasé por alrededor de la letrina, por cualquier bicho y arrojé el papel dentro. Nada más hice en sentarme cuando sentí algo que bajó fue tan rápido y entonces me llené de mucho miedo. El niño no lloraba yo no tenía nada colgando placenta absolutamente nada tampoco quedé sangrando bastante. Me entraron unos nervios me daba miedo hasta de mirar la letrina nada más de pensar que el niño no estuviera completo el miedo me ganó me fui a la casa me puse a planchar el uniforme a mis hijas y el mío me acosté a la una de la mañana. Al día siguiente me puse a arreglar a las niñas que iban para la escuela y me fui a trabajar cuando me llama la hermana de la abuela paterna de mis hijos y me dice Adriana mira lo que pasó a tu suegra porque ellas me hablan así aunque yo no esté con Pablo, iba para el baño y escucha el llanto de un bebé y se asoma a la letrina y lo ve enseguida llamó al vecino y él mandó a la hijastra que llamara a los bomberos y enseguida llegaron y lo sacaron y es un varón y está vivo. Yo a la vez me alegré y tuve miedo porque no sabía cómo iba a decir que ese era mi hijo. Ya el día 10 de mayo mis hermanas fueron al trabajo y me descargué en llanto y les comenté lo que me había pasado y desde allí quedé detenida.
Cómo me gustaría poder retroceder el tiempo y que fuera 8 de mayo y en vez de haber huido haber pedido ayuda.
Algunos periodistas, por obtener noticias, no les importa lo que publican con tal de ser los No.1. Ningún medio había tenido mi declaración hasta ahora y lo he hecho porque yo soy un ser humano como ellos y tengo ahora 4 hijos y siempre he sido una buena madre y soy la que lucho por mis hijos.
Las quemaduras del bebé se deben al papel que yo había prendido como el niño cayó encima de una llanta... tal vez como los baños de letrina se limpian con aceite de carro quemado lo más probable es que la llanta tenía residuos de esos químicos y el papel que yo eché al hacer contacto quedó prendido y el niño se quemó.
Le doy gracias a Dios de que mi hijo esté vivo y por eso su nombre es Ángel y lo quiero mucho como a sus otros hermanos".
El caso de Adriana no es el único, y les podemos asegurar es que hemos recabado la mayor información para que las mujeres que necesiten ayuda sepan dónde y cómo encontrarla. ¿Y el niño?
El bebé de Adriana, llamado por ella misma "Ángel", milagrosamente se salvó. Hoy está fuera de peligro, respira por sí mismo y se desarrolla como un bebé normal, pese a las quemaduras que sufrió y lo insólito de su nacimiento.
El doctor Alejandro Pérez opina que no es bueno decirle la verdad al niño cuando crezca. Generalmente, el niño es dado en adopción, la única vida que conoce es donde ha crecido. Además, probablemente ni siquiera lo crea si le dicen la verdad.
En tanto, la vice ministra de la Juventud, Doris Zapata, aseguró que el MINJUMNFA ofrece orientación a las madres para que no incurran en estos delitos, además, el ministerio juega un papel de protector del menor.
Cuando un menor sufre abuso o maltrato de sus padres, es remitido al Ministerio Público y al Juzgado de Niñez y Adolescencia; luego la institución buscará un lugar (albergue) adecuado para que el menor esté en un ambiente mejor para su estabilidad física y emocional. Se le quita a la familia hasta que se terminen las investigaciones pertinentes del caso.
El MINJUMNFA no le devuelve el pequeño a sus padres, si se comprueba que éstos están incapacitados para atenderlos.
En el caso de Angel, la abuela materna quiere cuidarlo, pero se queja de que ni siquiera se lo dejan ver.
LA IGLESIA OPINA
Según el sacerdote Miguel Giorgio, párroco de la Basílica Menor Don Bosco, la iglesia no avala esta práctica antihumanitaria, aunque la madre esté en riesgo. Explicó que la iglesia católica prohíbe el aborto, porque ningún individuo puede manipular la vida de otras criaturas hechas por Dios. Para los católicos, la persona existe desde su concepción y recomendó que es más viable acudir a dar esos niños en adopción.
Según el psiquiatra Alejandro Pérez, los factores que inciden para que una mujer se deshaga de su hijo son:
Un embarazo no deseado. Problemas con su pareja porque el padre del bebé no quiere hacerse responsable. No tener una buena posición económica. Si la familia de la futura madre no está de acuerdo con el embarazo.
¿ES O NO CRIMINAL, O LOCA?
"No es que la persona está loca o se volvió loca, es que no hay relación afectiva con este niño que lleva en el vientre, por eso lo abandonan, lo arrojan a la basura o a una letrina porque tienen muchos problemas y piensan que el niño será un problema mayor".
Pérez indicó que cuando se hace una revisión biográfica de la madre, siempre coinciden en una persona que no ha terminado los estudios, que no tiene un trabajo estable, que los padres y ella tienen problemas económicos y piensa que la forma más fácil de escapar es tratando de deshacerse de esta responsabilidad.
LEGAL:
Depende del Ministerio Público considerar si hay suficientes evidencias para determinar si hubo un delito, por lo tanto, compete la pena.
UN CASO:
El siquiatra recordó que hace 10 años atendió el caso de Irania Burgos, una mujer que residía en Samaria, San Miguelito, y que mató a su hijo de un año de 27 puñaladas. Ella decía que había matado a la representación del anticristo. Se le determinó que estaba loca.
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