Ellos no pueden apreciar las buenas jugadas y elogiar los golazos del Mundial por la televisión. Pero igual, están al tanto de lo que pasa a diario en los partidos de fútbol.

"Yo no veo, pero no me pareció bueno lo de Brasil en el primer partido". Esas fueron las palabras de Julio Lene, uno de los dos ancianos invidentes que sigue los partidos del Mundial por la radio.

Considera que tienen "muchos jugadores que son estrellas". "Tantas manos en un plato se convierten en arrebato", indicó. Don Julio, que está en el Pabellón San José del Hogar Bolívar, elogió a la selección de Argentina.

Dijo que es fanático del "béisbol y las 9 letras, pero como estoy aquí dentro y no hay más nada, oigo los juegos del Mundial".

El otro anciano ciego es Pedro Sanguillén, un señor de 84 años, que admite que desde que se levanta ya está pensando en encender la radio que le regalaron. Éste también es fanático del béisbol; sin embargo, como el Mundial está en la radio, se dedica a seguirlo a diario.

Pedro, que está en el Pabellón San Vicente, apoya también a Argentina. "Eso que hicieron con la goleada... ¡mi madre!... han dado de qué hablar", manifestó en referencia al último partido de la albiceleste. Estos dos, aunque no se emocionan mucho con las jugadas y los goles, sí se mantienen atentos a lo que acontece y tienen argumentos coherentes de los juegos. Eso se percibe al conversar con ellos.

EXIGIERON SUS TELEVISORES

En todos los pabellones, han estado siguiendo de cerca el fútbol desde que se inició el Mundial, pero desde antes del 9 de junio, los hombres le pidieron a Sor Miriam Romero, directora del Hogar Bolívar, que les colocaran más televisores y los complació.

Colocaron una pantalla más en los pabellones San Vicente, San José y San Rafael, que son los de varones.

La edad no impide a estos caballeros seguir de cerca el fútbol y... ¡por qué no!... recordar sus años de juventud cuando practicaban este deporte.