La discapacidad no se ha convertido en un impedimento para Mercedes Flores y un grupo de sordos que viven en diferentes comunidades en la provincia de Coclé.

A pesar de las limitantes, este grupo de personas ha logrado salir adelante y con esfuerzo confeccionan artesanías y caballitos de palo para ser autosuficientes.

Yesica Flores, es hija de Mercedes, quien es sorda, y cuenta que su madre es una mujer ejemplar porque a pesar de su discapacidad ella trabaja con otros sordos y les ayuda a aumentar sus ingresos, por ello todos los días confeccionan artesanías en un pequeño local que su madre alquila en El Chorrillo de Penonomé.

Comentó que se siente orgullosa de su madre, además es ella quien traduce y ayuda a su madre y a los otros sordos a comunicarse con otras personas.

Sin embargo, necesitan con urgencia más máquinas de coser y equipo porque no cuentan con muchos recursos, además les hace falta sacar la personería jurídica y por ello están solicitando ayuda al Gobierno y a quien los pueda ayudar.

Esta es la única fundación de sordos que hay en la provincia de Coclé.