Josefa Gutiérrez había ido a arreglarle el cabello a su cuñada Bélgica, quien vive justo al lado de su casa, en compañía de su esposo y su hermanito Eduardo Hernández, de 9 años, en el sector 4 de la 24 de Diciembre.

A eso de las 7: 00 p.m., se encontraban en la sala conversando cuando, de repente, dos sujetos llegaron amenazadoramente, gritando que alguien saliera. Al ver que sus gritos no tenían respuesta, los sujetos, aprovechando que la puerta de la casa estaba abierta, se acercaron a la entrada preguntando si alguno de los presentes lo conocía, sin más explicaciones sacó un arma y disparó. Él y su acompañante salieron huyendo.

Tristemente, el disparo fue directo al lado izquierdo del pecho del pequeño Eduardo, quien adolorido gritaba a su hermana: "Pita me murió, me murió aquí".

Aún con esperanzas, la familia llevó a Eduardo a una clínica, pero al llegar la doctora declaró su muerte.

TRISTE FINAL

A sus 21 años, Josefa Gutiérrez había decidido pedir la custodia de su pequeño hermano, pues desde que la madre de ambos murió, Eduardo había vivido con una tía. Con ayuda de su esposo, Josefa decidió que podría criar y educar a su hermano. Hasta este fatal lunes, todo había ido bien.

VIEJAS RENCILLAS

Uno de los sujetos resultó ser un vecino conocido como "Antidoping", mientras que el otro sujeto fue identificado como "Cojo". En un informe, la Policía explicó que los agresores habían ido en busca de Luis Quintero, tío del menor, quien se encontraba en la residencia en ese momento y que también resultó herido en el antebrazo izquierdo. Al parecer, Quintero y sus agresores tenían disputas. Se busca a los responsables de este hecho.

MUERTE

Aunque intentaron salvar al pequeño Eduardo, éste murió en brazos de su tía.