
Según los artesanos, las visitas de los turistas ha disminuido debido a los trabajos.
Fotos: JESUS SIMMONS
Según los artesanos, las visitas de los turistas ha disminuido debido a los trabajos.
Fotos: JESUS SIMMONS
Según los artesanos, las visitas de los turistas ha disminuido debido a los trabajos.
Fotos: JESUS SIMMONS
Deben caminar en medio de los trabajos.
Los pasos peatonales son angostos.
Según los artesanos, las visitas de los turistas ha disminuido debido a los trabajos.
Fotos: JESUS SIMMONS
Deben caminar en medio de los trabajos.
Los pasos peatonales son angostos.
Según los artesanos, las visitas de los turistas ha disminuido debido a los trabajos.
Fotos: JESUS SIMMONS
Deben caminar en medio de los trabajos.
Los pasos peatonales son angostos.
Según los artesanos, las visitas de los turistas ha disminuido debido a los trabajos.
Fotos: JESUS SIMMONS
Deben caminar en medio de los trabajos.
Los pasos peatonales son angostos.
Según los artesanos, las visitas de los turistas ha disminuido debido a los trabajos.
Fotos: JESUS SIMMONS
Deben caminar en medio de los trabajos.
Los pasos peatonales son angostos.
Complicado. Recorrer a pie o en auto el histórico barrio de San Felipe, se ha vuelto una verdadera odisea, porque hay muchas calles cerradas y rotas por los trabajos que se realizan en el lugar para cambiar las tuberías y reparar las calles.
Para corroborar lo difícil que es moverse en el Casco Antiguo, el equipo de DIAaDIA recorrió el lugar y comprobó que hay que tener mucho cuidado al caminar por el corregimiento.
Para no sufrir un accidente, debe estar pendiente de dónde se pisa, pues las calles están en mal estado y hay que caminar por angostos zaguanes en los que de a milagro cabe una persona.
Un inspector de la Oficina del Casco Antiguo, expresó que tiene que estar pendiente de los turistas, los autos y de las pesadas máquinas que están trabajando en el área.
Los que están pasándola mal con los trabajos que se están haciendo en el Casco Antiguo, son los buhoneros y los dueños de los locales comerciales.
Mirta Hurtado, una de las dueñas de un local, explicó que desde que empezaron los trabajos sus ventas han bajado drásticamente, al punto que hay días que no hace un solo dólar. Ellos son conscientes de que una vez terminen los trabajos las cosas volverán a la normalidad a San Felipe.