La residencia que cuidaba Peralta estaba a dos casas de la de él.
Carolina Sánchez
| DIAaDIA
Muy colaborador. De esa manera los residentes de Caimitillo recordarán a Ernesto Peralta, de 54 años, quien fue asesinado de tres tiros por delincuentes la tarde del martes.
Una de las vecinas manifestó que Peralta era oriundo de Darién y desde muy joven vivió junto a sus padres en una humilde casa de bloque que ayer permanecía cerrada.
La señora expresó que a Peralta le decía de cariño "Chocho", quien sufría de ataques de epilepsia. Se conoció que todas las personas de la comunidad le confiaban los mandados, por lo que le pagaban a manera de ayuda.
Ernesto era padre de una hija, abuelo de siete nietos y vivía solo. Ayer quienes pasaban frente a la casa no podían creer que "Chocho" estuviera muerto.