
La carrera fue un evento que logró reunir a padres e hijos durante las competencias. Foto: Anayansi Gámez
La carrera fue un evento que logró reunir a padres e hijos durante las competencias. Foto: Anayansi Gámez
La carrera fue un evento que logró reunir a padres e hijos durante las competencias. Foto: Anayansi Gámez
La carrera fue un evento que logró reunir a padres e hijos durante las competencias. Foto: Anayansi Gámez
La carrera fue un evento que logró reunir a padres e hijos durante las competencias. Foto: Anayansi Gámez
La carrera fue un evento que logró reunir a padres e hijos durante las competencias. Foto: Anayansi Gámez
La carrera fue un evento que logró reunir a padres e hijos durante las competencias. Foto: Anayansi Gámez
Rostros de felicidad dibujaban con sonrisas la palabra hermandad, lo cual sirvió para poner en marcha la primera carrera.
De un momento a otro, el punto de partida quedó abarrotado por centenares de espectadores picados por la curiosidad. ¿Qué sucedía?
Eran los más pequeñines de la fiesta quienes que se preparaban para entrar en calor. "¡En sus marcas, listos, fuera, ya!", gritó el altoparlante y, a su vez, saltaron a correr más de 70 niños y niñas, entre 1 a 11 años.
La carrera comprendía un kilómetro de distancia, y al final fue liderada por Vicente Mauchi, en la rama masculina, y Carolina Etchelecu, en la rama femenina.
“Me gustó correr porque pude demostrar mi talento; la carrera estuvo divertida”, comentó Mauchi muy emocionado por el triunfo.
Más del evento
La conmoción fue subiendo de nivel. El momento crucial llegó con la salida de las categorías 5 y 10 kilómetros, ya que el padre Ayechu, de 89 años, aguardaba por la señal de partida, ataviado con lentes negros y zapatillas blancas.
Sonó la alarma, y en multitud partieron cientos de corredores junto a la figura de Ayechu.
En esta ocasión, los méritos se los llevó Armando Solano, en la distancia de 5 kilómetros (masculino); mientras que Sara Núñez de Viera lideró por el grupo de las féminas.
Por otra parte, en la carrera de 10 kilómetros sucedió algo que incomodó a varios.
Resulta que Jorge Castelblanco, quien había llegado primero a la meta, fue descalificado.
De acuerdo con Gregorio Miró, presidente del Club de Corredores del Istmo -entidad que organizó la actividad-, fue el corredor quien “se equivocó”.
“Castelblanco llegó primero a la meta, pero no completó una de las rutas, se adelantó y tuvimos que descalificarlo”, detalló Miró.
“Las rutas estaban detalladas en nuestra página web hace semanas, pero él (Castelblanco) junto a otros tres corredores doblaron un kilómetro antes”, manifestó el directivo.
Por este hecho, el primer lugar de la categoría de 10 kilómetros se le otorgó a Mario Naranjo, quien completó el recorrido establecido por la organización.
Entretanto, Silka Núñez fue la más rápida por las féminas, y tras su desempeño Miró destacó que la atleta se ganó el derecho de representar al Club de Corredores del Istmo en la carrera de 10 kilómetros en Torrión, México, en octubre.
El acto aún no terminaba cuando, repentinamente, los aplausos y la algarabía del público irrumpieron en el lugar. Era el padre Ayechu quien se aproximaba a la meta, recibido en medio de una calle de honor por niños, jóvenes y adultos.
“Me siento satisfecho y orgulloso de ver tanta gente que ha participado de la actividad y que está aquí reunida. Ha sido un evento muy bonito, que año tras año logra unir a la comunidad. Es un evento que vale la pena”, expresó el cura.
Ayechu es un sacerdote que a sus 89 años corre todas las mañanas de 5 a 10 kilómetros.